Dos personas comprometidas con atentados contra el empresario, Luis Alfonso Cepeda, gerente propietario del Hotel Cocoplum, quien en dos oportunidades resultó herido por impactos de bala, fueron capturadas por la policía y aseguradas por el juez de garantías que conoció el caso. “Sin embargo, seguimos con miedo, nos sentimos amenazados, porque sabemos que se trata de gente intolerante y pueden seguir atacando”, dijo uno de los miembros de la familia Cepeda
Se trata de Diego Herrera y Warren Hooker, a quienes se les imputo cargos por tentativa de homicidio, por ser los autores intelectuales de los dos atentados. Warren Hooker aceptó los cargos mientras que Herrera, no aceptó la sindicación.
En tanto los autores materiales, presuntamente contratados por Herrera y Hooker para el atentado del 21de octubre del 2013 y quienes fueron identificados como Freddy Jonathan Gutiérrez y Leonardo Paternina Torres, se allanaron a los cargos, según la información oficial.
La comunidad del sector de Cocoplum ha solicitado al Comisario, Mariano Hooker que actúe diligentemente restituyendo el espacio público de la playa y desalojando a Roldán Forbes León, socio de Diego Herrera, de quienes existen quejas de agresiones contra los propietarios del Hotel Cocoplum.
El porqué
En el año 2010 los propietarios del Hotel Cocoplum, compraron un lote en el área de Rocky Cay y frente a ese terreno está la playa, que es un bien de uso público y en donde ha sido instalado un kiosco para el expendio de licores, sin un permiso legal y además utilizan el terreno de la familia Cepeda como baño público, parqueadero y botadero de basuras.
Ya en varias oportunidades al tratar de limpiar el lote de su propiedad, los integrantes de la familia Cepeda han sido víctimas de amenazas con armas corto punzantes.
La familia Cepeda agradeció a las autoridades, en especial a la Fiscalía y a la Sijin por la eficiencia en este proceso y se espera que las diligencias continúen hasta que, tanto los propietarios del terreno, como toda la comunidad tengan paz y se respeten los bienes públicos y los derechos de propiedad privada por encima de la intolerancia y la violencia.