La cadena de electrónica Multi Digital lleva el record en quejas. Varios casos contra turistas nacionales y extranjeros han terminado en denuncias, e incluso en peleas y amenazas por sobrecostos y mala calidad. Ahora Almacén Madrid también es acusada de vender un producto de mala calidad y negarse a responder.
Por César Pizarro B
En junio pasado con motivo del Mundial de Futbol Brasil 2014, compré para mis hijos un balón de futbol marca Adidas, tipo Brazuca, que además traía en el dorso la insignia que caracterizó la Copa Mundo del penta campeón, y que posteriormente fue distorsionado como meme en las redes sociales para ridiculizar el papelón que hizo el gigante suramericano en su propio patio.
Por esa esférica compadra en la moderna tienda de ropa deportiva y accesorios Almacén Madrid, pague 70 mil pesos. Ese día salía de viaje a Barranquilla, e incluso dejé olvidada la tarjeta de crédito con la que pagué y del establecimiento llamaron a mi casa a avisar que había dejado mi “chequera plástica”.
Al susodicho balón el aire solo le duró un mes, por que empezó a desinflarse, pero como los chicos estaban en la isla de vacaciones y lo habían dejado en La Arenosa, no lo usaron por esos días. Pensé entonces que podía ser como le pasa a los carros cuando permanecen parqueados largas semanas sin uso que tienden a pincharse. Por ello no creí necesario traerlo al almacén donde lo compré. Lo que hice fue llevarlo a una llantería donde lo volvieron a inflar y pedí que lo metieran a una tina de agua a ver si hacía burbujas, pero todo indicaba que estaba bien. Pasó la prueba y se quedó en Barranquilla. No obstante, la recién comprada pelota de marca paulatinamente se desinfló recurrentemente hasta no servir más, antes de cinco meses.
Recuerdo que en mi infancia, si acaso daba para comprar un balón Mikasa, de los que vendía en la 20 de Julio el almacén del papá de los “Mellos” Sánchez, o cualquiera otra marca criolla y no tan famosa, por qué Adidas no estaba a mi alcance, pero duraba un par de años, aún en jornadas diarias en las calles de Natania.
Ahora en octubre, los chicos volvieron a San Andrés de vacaciones y trajeron el desinflado Brazuca con la esperanza que el Almacén que hace menos de seis meses lo vendió, reconociera que su afamado producto había resultado más chimbo que cualquier bola de trapo que en Barranquilla seguramente venden más barata y con mayor duración. Luego de una semana de consultas en el almacén Madrid, el veredicto es que no podían hacer nada. Me tocaba perder el producto. Frustrados por la respuesta, me sacaron la caja intacta con un avión a control remoto que aun conservan en su empaque desde diciembre pasado, porque nunca lo han podido usar, porque nunca trajo el cable de carga. Ese producto también lo compré en San Andrés, a unas dos cuadras del Almacén Madrid.
Pregunté el pasado sábado en una tienda Adidas del Centro Comercial Buenavista de Barranquilla, cuánto costaba el balón Brazuca del Mundial. El original costaba en pleno Campeonato de Futbol $ 310.000.oo. Pero Adidas fabricó una imitación, de la misma fabrica por valor de $ 80.000.ooo. Nosotros damos tres meses de garantía y si lo hubiera comprado aquí y le sale malo, se lo hubiéramos cambiado, fue la respuesta del dependiente, quien me explicó que “esas tiendas multi marcas” no son autorizadas por la fabrica, si no que comercializan productos de todas las marcas pero no dan garantías.
El problema que hoy afecta a una gran parte del comercio de San Andrés es que solo venden productos y ya. Pero no otorgan ninguna clase de garantías. Cámara de Comercio, Gobernación del Departamento (Precios, Pesas y Medidas) y Liga del Consumidor, deberían promover una mayor cultura entre el comercio, de calidad y garantía para los compradores porque cada vez los casos son más recurrentes.
Y con tales circunstancias pierde el comercio, que siempre se había preciado por vender productos originales, de marca, con lo cual nuestro comercio conservaba una ventaja comparativa frente al comercio en las demás ciudades del país donde era habitual conseguir productos “chiviados” procedentes de los sanandresitos.
Pero ya hoy día, en cualquier almacén de gran superficie (estilo Éxito, Olímpica, Cencosud, etc.) se consiguen productos que se comercializan en San Andrés, tan originales como los de fábrica, pero adicionalmente, concediéndole la respectiva garantía al usuario. Como van las cosas, prefiero ir a un sanandresito o un Éxito, que volver a comprar aquí.