El pasado viernes 16 de octubre el Cuerpo de Bomberos con el apoyo de la Defensa Civil Colombiana y Sopesa comenzó la maniobra de demolición de un edificio viejo ubicado en cercanías del barrio Santana, el cual se le había desprendido gran parte de su estructura ocho días antes, atemorizando a la vecindad ya que este amenazaba con caer a las casas cercanas.
Las viviendas tuvieron que ser desalojadas para comenzar el proceso de demolición y así garantizar la vida de los habitantes cerca del edificio viejo que era utilizado como una bodega de soldadura.
El Comandante del Cuerpo de Bomberos William Gordo afirmó que para iniciar el proceso de demolición del edificio se tuvo que realizar un estudio para saber con exactitud cómo empezar, sin afectar a ninguna de las viviendas cercanas al edificio.
Para los habitantes del sector fue muy aterrador sentir en horas de la madrugada como el edificio se caía, sobre todo para una familia que su fachada fue destruida, por los escombros de esta edificación.
Rubén Darío Alvarado ha trabajado por años en la edificación la cual fu entregada por la dueña para que este la cuidara mientras ella está fuera de la isla por problemas personales y económicos, hasta que se logre vender, para él es difícil la situación ya que depende económicamente de dicho lugar, donde realizan soldaduras eléctricas.
“Soy el representante de la bodega que colapsó a causa de los aguaceros que cayeron en los últimos días, de esta bodega dependen cinco familias, por la situación que se ha presentado hemos tenido que suspender nuestras labores, sabíamos las condiciones del edificio pero ya las autoridades tenían conocimiento, pero no se había hecho nada frente a esto, tengo 16 años trabajando en dicho lugar, esto afectó a tres familias que viven cerca del edificio, tenemos que esperar que finalicen la demolición a ver si lo tumban todo o solo una parte, para ver si podemos continuar nosotros laborando para poder llevar el sustento a nuestros hogares”.