La expresión se la dijo a The Archipielago Press un empresario de las islas que genera empleos para más de 100 empleados, que en esta coyuntura de crisis ha experimentado la caida de las ventas por el orden del 80 por ciento. Y aunque ha mantenido su nómina, advierte que tendría que retirar trabajadores y cerrar algunos de sus negocios; siete en total en la linea gastronómica y de alojamiento turístico.
Vamos a esperar a ver que pasa, si no tendremos que cerrar algunos negocios y sacar trabajadores, explicó el empresario bajo la condición del anonimato, y quien contó una experiencia estando en un sitio turístico del Eje Cafetero: «habia un grupo de personas disfrutando de la Hacienda Napoles y sin saber que nosotros tenemos vínculo con la isla, estaban hablando de San Andrés, y decían que la tarjeta de turismo era demasiado costosa, que no había derecho a que cobraran por ingresar a un territorio colombiano, que había mucha basura, calles en mal estado y mala atención al turista».
Consultado sobre cuál debería ser el futuro de la tarjeta de turismo, expresó que se debería rebajar a la mitad de su valor actual para reactivar un turismo sobre todo de grandes grupos, por que eliminar esa contribución no es posible por que se requiere para el mejoramiento de la infraestructura turística, explicó.
La tarjeta de Turismo fue creada por el presidente César Gaviria Trujillo en el decreto 2762 de 1993 para la infraestructura turística de las islas pero la Asamblea Departamental desnaturalizó su uso destinándola a gastos de funcionamiento también, y en el Gobierno de Ronald Housni Jaller se duplicó su costo para rebajar en un 50 por ciento el impuesto de las importaciones de mercancías hacia el Puerto Libre.