El viernes otra nave, en esta ocasión un buque científico de la armada de los Estados Unidos, ‘invadió’ el Mar Caribe colombiano, reveló en menos de 48 horas el Presidente de Colombia Juan Manuel Santos, luego de la incursión aérea de un bombardero nuclear de Rusia.
«Un buque adscrito a la Marina norteamericana, estaba en Quitasueño. Se acercó la patrullera, la corbeta Almirante Padilla a ese buque, que es un buque de investigación científica, y le preguntó: ‘¿Usted tiene permiso para estar aquí?’. Dijo que no. Entonces lo invitó a que se saliera del agua de territorio colombiano, de aguas territoriales colombianas. El buque se salió”, dijo el gobernante del país suramericano.
Agregó que “Nosotros haremos la nota diplomática correspondiente con la Embajada Americana, con el Gobierno americano. Pero eso sucede con mucha frecuencia. Eso no es nada extraordinario. Aquí no hay que armar una tormenta en un vaso de agua”. Santos ordenó otra nota diplomática de protesta esta vez al gobierno de Washington.
Mientras espera la respuesta de Moscú a la protesta diplomática de Bogotá por el vuelo del Tupolev -160 y revelar la presencia de otra nave intrusa de las superpotencias militares en el espacio aéreo y marítimo colombiano, Santos dijo el viernes en Bogotá que su gobierno dotó a Colombia de mayor seguridad inclusive superior a la que implementó en 8 años el gobierno de Álvaro Uribe Vélez.
«Simplemente subrayar que hoy, sin duda alguna, somos un país mucho más seguro de lo que éramos hace tres años. Y hace tres años, sin duda alguna, éramos un país mucho más seguro de lo que éramos 10 años atrás», expresó Santos en la ceremonia de los 94 años de la Fuerza Aérea Colombiana.
El procurador General de la Nación, Alejandro Ordóñez Maldonado, también se refirió al sobrevuelo de aviones de guerra de Rusia en el espacio aéreo de Colombia de paso por Venezuela y Nicaragua, países que han tensionado las relaciones diplomáticas con el gobierno de Bogotá. «Eso preocupa», dijo el jefe del Ministerio Público colombiano.
Clic para ir a la galería fotográfica
Todo lo anterior originó que el comandante de la FAC, general del aire Guillermo León León, anunció para las primeras semanas de 2014 la instalación de tres radares con tecnología de punta que ‘mirarán’ con mayor precisión el espacio aéreo del país americano e interceptar aeronaves intrusas.
La FAC con anterioridad detalló la incursión del Tupolev 160 ruso. «Inmediatamente fueron detectadas por el Centro de Comando y Control de la Fuerza Aérea Colombiana y de acuerdo con los procedimientos establecidos de interdicción aérea, el Sistema de Defensa y Vigilancia de la Institución reaccionó de manera oportuna con aeronaves de seguimiento e interceptación, con el fin de identificar la procedencia de las mismas, y al verificar que no tenían permiso, a través de los sistemas de comunicación se efectuaron las coordinaciones y se dieron las instrucciones pertinentes para salir del territorio colombiano, efectuándose el acompañamiento por parte de los aviones K-fir de la Institución, hasta que abandonaron espacio aéreo nacional.
De acuerdo al Decreto 1692 del 15 de octubre de 1992 por el cual se reglamenta la ley 89 de 1938, sobre Aeronáutica Civil en lo relativo al sobrevuelo y/o el sobrevuelo y aterrizaje de aeronaves de Estado proferido por el Ministerio de Relaciones Exteriores, deben tramitar un permiso del Gobierno Nacional para cruzar el espacio aéreo y evitar cualquier tipo de incidente, permiso que no fue solicitado a la Fuerza Aérea Colombiana. La Institución continuará ejerciendo la soberanía del Territorio Nacional y del espacio aéreo colombiano, como lo consagra la Constitución Política». Tomado de TNN@Politica