Grave accidente en la madrugada del Día del Trabajo. La indignación que ha causado en la sociedad sanandresana la muerte del joven John Hudgson Rodríguez, se refleja no solo en la reacción airada que los parientes del occiso expresaron el viernes en la tarde en las afueras del Juzgado de Control de Garantías que obligó a reforzar la seguridad policial, sino también en los numerosos comentarios de espontáneos que reprochan que el victimario no haya pagado un solo día de cárcel por la primera tragedia que causó hace cuatro años, porque era menor de edad y sus padres lo sacaron hacia Panamá.
Y aunque ello no ocurrió en esta ocasión por que el victimario, identificado como Harold Anderson Mow Hooker, fue capturado en flagrancia por la Policia Nacional en el sitio de los hechos y sometido a tres pruebas de embriaguez que arrojaron positivas, se legalizó su captura y se dictó medida de aseguramiento, la tipificación que se hizo de su conducta no augura una pena compensatoria con el daño causado y hasta podría obtener la libertad condicional.
Tanto que la juez de Control de Garantías al momento en que la Fiscalía hizo la imputación del caso y ofreció la posibilidad de allanamiento para reducción de pena, le pidió al ente acusador corregir la tasación punitiva que el fiscal había fijado en penas de entre 2 y seis años de cárcel por tratarse de un homicidio culposo agravado. Lo mínimo que se le advirtió al imputado sería una condena de 4 años por el agravante del estado de embriaguez en que conducía, lo cual fue verificado en dos pruebas de alcohosensor que arrojaron entre 039 y 041 gramos de alcohol y diagnostico clínico de alcoholemia que arrojó positivo para embriaguez.
No obstante la Fiscalía aclaró que apenas comenzaba una investigación tendiente a establecer si realmente el accidente fue producto del desprendimiento de una de las llantas de la camioneta que conducía Mow Hooker, o éste evento fue posterior. El ente acusador también aclaró que con el transcurso de la investigación se podría modificar la tipificación.
El fiscal del caso reveló pruebas que indican que el joven Mow Hooker en el año 2011 causó otro homicidio culposo por accidente, pero entonces era menor de edad y el proceso aún no se ha decidido; familiares de esa primera víctima se hicieron presentes en la sala de audiencia. También tiene anotaciones por lesiones personales que fueron conciliadas. Ninguno de los dos hechos se constituyen en antecedentes penales por no haberse proferido sentencias contra Mow Hooker, pero los familiares del primer caso ahora buscan mover el proceso y que no se quede impune.
Durante la audiencia en la que The Archipiélago Press fue el único medio presente, hubo una fuerte presencia policial. Un total de 14 unidades policiales dentro de la sala, en el pasillo y en las afueras del Juzgado, buscaban evitar que los ánimos caldeados generaran problemas de orden público. Sin embargo pese al dolor, los familiares de Hudgson Rodríguez, observaron un comportamiento decoroso y lo único que esperaban era que se les impartiera justicia.
De acuerdo con el Secretario de Movilidad, Daniel Pechtal García, “en las pruebas de alcoholemia, la primera fue de 0.41 y la segunda el resultado fue de 0.38 o 0.39 algo así , pero sí estuvo consumiendo alcohol esta persona, la primera por encima de punto cuarenta que es grado uno y bajo punto cuarenta que es grado cero, pero en cualquiera de las dos pruebas de alcoholemia el resultado fue positivo igualmente se le practicó la prueba al conductor de la moto, los resultados no han sido revelados pero lo más probable es que estas den un resultado negativo porque esta persona iba hacía San Luis a cumplir con su trabajo”.