En un contenedor para no ser expuesto a la intemperie, se encuentra la cámara hiperbàrica adquirida con recursos del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo por valor de $150 millones de pesos. Para poder sacar la cámara del Hospital, se debió romper uno de las paredes. Se espera que Fonade haga las reparaciones del caso en los pisos para poder volver a reubicar la Cámara Hiperbàrica.
Por: Daniel Newball H.
El rompimiento de una pared del Hospital Departamental Amor de Patria y la aparición de un contenedor en la parte posterior del edificio despertaron sospechas hasta llegar al punto de que, en el momento de saber que todo giraba en torno a la recientemente adquirida cámara hiperbárica, se encendieron las alarmas debido a las condiciones inadecuadas en las cuales se encuentra.
Para los conocedores de este tipo de equipos, el que la cámara este en un contenedor metálico, expuesto a las condiciones climáticas actuales de altas temperaturas, es la elaboración de la “crónica de una destrucción anunciada”, debido a que muchos circuitos eléctricos y elementos del equipo podrían resultar dañados.
No obstante la situación generada por el almacenamiento temporal de la cámara, las directivas del hospital dan una señal de calma a la comunidad manifestando que el equipo está en buen estado y que en cualquier momento volverá a su lugar original para seguir en operación al servicio de la comunidad.
“La cámara hiperbárica está, desde que lo recibimos en el 2012, pendiente a una reparación y la reparación está a cargo del Ministerio de Turismo, Industria y Comercio para tener la cámara en funcionamiento y para también traer uno para Providencia.
“En este momento se encuentra en un contenedor la cámara hiperbárica porque los pisos del salón donde se va a colocar están siendo reparados por Fonade, la reparación de esos pisos tienen una duración de tres meses y medio y una vez nos entreguen los pisos, conjuntamente con el interventor y el hospital vamos a revisar poner la cámara en el lugar donde debería estar originalmente.
“Nunca hemos usado la cámara desde que llegó al hospital, es de excelente calidad y tiene una duración de treinta años de uso, valió pues la pena la inversión en el aparato pero no hemos intentado usarla sin que exista un visto bueno de una persona que nos diga que se puede usar en condiciones de seguridad”, dijo Martha Lía Arbeláez, gerente de la IPS Universitaria en San Andrés, actual administradora del Hospital local.
Pero la preocupación sobre la colocación de la cámara en un contenedor en las condiciones climáticas actuales, los cuales podrían ser perjudiciales para la misma, persiste por lo que se requirió del concepto de un experto en el tema para poder calmar los ánimos.
“Se están realizando en el hospital unas reparaciones en el piso antiestático ya que la misma estructura del hospital tuvo unas fisuras por lo que no garantizaba la estabilidad de los suelos para la colocación de la cámara hiperbárica.
“Esto tuvo garantía de Fonade, que fue la que construyó el hospital, y después de un pleito largo finalmente se consiguió que cambiara los pisos, no solo de la sala de la cámara, sino también de cirugía y sala de partos.
“Para poder hacer la reparación, tocó sacarla del edificio porque es demasiado pesada y se resguardó en un contenedor porque es demasiado pesada y una vez se terminen los pisos, más o menos dentro de un mes, se colocará la cámara de nuevo en el salón donde pertenece.
“Ahora bien, ya el Gobierno asignó unos recursos para poder reparar la cámara y una vez está en su sala especial se procederá a efectuar las reparaciones del caso para que quede funcionando con su sistema de comunicaciones, luces, sistema hidráulico y oxígeno.
“Hasta el momento, ninguno de los expertos que han revisado la cámara han hecho ninguna observación al respecto; han venido de Argentina, Estados Unidos, y en ningún momento no nos han dicho que le vaya a pasar algo a la cámara. Nos han dicho que la cámara está en buen estado, solo que hay que hacerle mantenimiento”, dijo el Ingeniero Charlie Whitaker, director científico del centro asistencial.
Con el fin de incrementar el turismo en las islas, el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo y el Fondo Nacional de Turismo (Fontur), anunció una inversión de 450 millones de pesos en la reparación de algunas estructuras en San Andrés y Providencia.
Una partida de 150 millones de pesos fue destinada para reparar y poner en funcionamiento la cámara hiperbárica ubicada en el Hospital Departamental de San Andrés, para aplicarlos a la práctica de buceo recreativo y a Providencia le corresponden 250 millones de pesos para la adquisición de una cámara hiperbárica nueva y otros 55 millones para los estudios de la rehabilitación del antiguo Hotel Aury.
Con el arribo de Matías Nochetto, coordinador médico para América Latina de Divers Alert Network (DAN), organización mundial que propende por el buceo seguro y sostenible y Francois Burman, experto de la misma entidad, la Cámara Hiperbárica (CH) de San Andrés había arrancado su proceso de optimización general en el año 2011.
Las instalaciones operativas permitirían cumplir con las exigencias en relación a la seguridad en la práctica del buceo en esta zona colombiana del mar Caribe, lo cual constituye un aspecto vital para la promoción de la actividad como oferta turística de alta competitividad, posibilidad que, debido a las circunstancias actuales, deberá ser postergado hasta nuevo orden.