Frente a la reactivada Ola de violencia y sangre que en la última semana se ha desatado en San Andrés, tiene razón la Secretaria del Interior Emiliana Bernard cuando dice que “esto hay que pararlo ya”, solo que debe ser un propósito que los primeros que deben propender por cumplir esa premisa, son las autoridades que la funcionaria representa y en representación de la gobernadora, junto a la Policía, el aparato judicial y demás autoridades pero con el concurso de la comunidad.
“Al Gobierno Departamental le preocupa la ola de sangre que se ha desatado en los últimos días en la isla de San Andrés. Es muy preocupante la situación, estoy aquí en la escena del crimen, doloroso lo que pasa en San Andrés con los jóvenes. Como gobierno tenemos que expresar las condolencias a la familia del señor Gary, igual que las otras familias que han perdido seres queridos en estos días. Como gobierno estamos consternados en menos de setenta y dos horas tenemos tres muertos y esto amerita un análisis serio con las autoridades. No sabemos realmente si tienen relación ó conexión, pero, realmente creemos que ha vuelto a ocurrir lo que teníamos hace dos años en San Andrés, pero, esto hay que pararlo, definitivamente hay que pararlo”, dijo consternada la funcionaria.
Claramente se mezclan los crímenes del reciente fin de semana; homicidios simples en virtud de retaliaciones, con hechos de sicariato que este año nuevamente ha empezado a golpear duramente la seguridad ciudadana y a provocar pánico y terror entre la comunidad isleña.
Sobre las primeras versiones de las autoridades judiciales la Secretaria del Interior recordó que ya corresponderá a las autoridades y a la Fiscalía realizar las respectivas investigaciones; lo importante es que se esclarezca esto pero también que pare esta ola de sangre y violencia que tenemos en San Andrés”.
Las primeras hipótesis de los tres crímenes simultáneos van desde venganzas, retaliaciones, ajustes de cuentas asociadas con bandas criminales o también pueden ser hechos aislados, por lo que se espera que la investigación diga cuál es la real situación y si hay conexión o no.
Ante la situación de tres (3) muertes violentas en menos de 72 horas las propias autoridades gubernamentales, policiales y judiciales reconocieron que era necesario efectuar un análisis a fondo, y evaluar los indicios de los autores materiales de los más recientes hechos de sicariato en la isla.
El desafio de las autoridades policiales, judiciales y gubernamentales es de gran nivel, pero se deberá acometer todas las acciones legales, judiciales, de inteligencia; la movilización del aparato estatal todo para evitar que nuevamente San Andrés llegue a los índices de criminalidad organizada a los que llegó en los años 2010-2011, e impedir que se salga de las manos el manejo de la seguridad ciudadana por cuenta de las guerras de bandos de narcotraficantes que siguen ajustando las cuentas que estaban pendientes aún, y al que parecen haber entrado nuevos elementos (sicarios criollos que se incuban en barriadas de miseria y falta de oportunidades sociales) con el que parecen estar acelerando la ejecución de sus cobranzas con sangre a quienes quedaron pendientes de riquezas mal habidas.
No puede haber justificación alguna para que las autoridades no sean más eficientes en el control de la criminalidad armada que de nuevo se toma las islas sembrando terror, porque en tan solo 27 kilómetros cuadrados, con dos puntos estratégicos de entrada y salida y con sistemas de vigilancia de alta tecnología, permiten descubrir quienes pueden estar ingresando a la ciudad para asesinar.