Si se consolida el ‘fenómeno del niño’ se minimizarían los fenómenos marinos. Es urgente la celeridad que debe darse a los planes de contingencia ante las altas posibilidades de que se presente una temporada de frentes fríos y huracanes que podían afectar al archipiélago y que se calcula comience en los primeros días de junio y que iría hasta comienzos de diciembre, de acuerdo con la información del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales –Ideam-.
En la comunicación el Ideam, recomienda a los Consejos Departamentales de Gestión del Riesgo de Desastres, de San Andrés y Providencia, La Guajira, Magdalena, Atlántico, Bolívar, Sucre y Córdoba, para que establezcan planes de contingencia y diseñen las estrategias de apoyo a la comunidad con el objetivo de minimizar las consecuencias que puede tener los efectos de estos, al menos una docena de fenómenos naturales que se pueden formar este año y que se supone serían tres huracanes de regular intensidad, uno en la escala máxima, que podría traer riesgos.
Claro que también existe la posibilidad de que el fenómeno del niño se consolide y la zona insular solo se afecte con uno o máximo dos vendavales que llegarían especialmente a la Guajira, se informó.
Se pidió a los pobladores de sectores como la vuelta a la isla, Loma y San Luis y a toda la comunidad que estén pendientes de sus techos, árboles, palmas cercanas para que no vayan a causar una emergencia y a los pescadores y conductores de embarcaciones turísticas para que estén pendientes de los pronósticos del tiempo y las condiciones meteorológicas y se acojan a las indicaciones que les den las autoridades y organismos de socorro.