En un caso poco común un hijo enseña a su padre a tocar la guitarra y forman una agrupación familiar realizando un sueño que ambos anhelaban. Cuando los visitamos estaban practicando y nos comentaron que tienen montadas 44 canciones, en estos momentos practican música country. El Extra dialogó con ellos.
Jerdy Figueredo-Hijo.¿Jerdy como aprendiste a tocar la mandolina?
Bueno, yo aprendí solo. Le dije a mi papá que me comprara una mandolina y lo hizo. Luego, escuché los CD’S de Willi Bee y empecé a practicar y a coger el ritmo de la mandolina, todos los días lo hacía, calipso, mentó y mucho más. También aprendí a tocar Piano para tocar en la iglesia bautista y después me inscribí en la escuela de música con el profesor Luis Ramos y él me enseñó las notas. Se tocar la guitarra, mandolina, piano y acordeón.
¿Cómo le enseñaste a tu padre?
Cuando el vio la mandolina me dijo: ¡Quiero aprender a tocar guitarra! Para tocar conmigo. Entonces empezamos a practicar todos los días. Le enseñé como se coge la guitarra y las notas. En la música uno tiene que ser constante y adquirir experiencias.
¿Cuál fue la primera canción que montaste?
La primera canción que yo monté fue un country titulada Good Night I Reave.
¿Cuántas canciones tienes montadas?
Ya son 44 canciones que tenemos montadas.
¿Cuál es tu sueño?
Mi sueño es ser un músico profesional y transmitir mis conocimientos a los jóvenes de Providencia.
Edgar Figueredo-Padre.¿Qué fue lo más difícil de aprender?
Todo, depende del interés que uno le ponga y con un profesor como mi hijo que tuvo mucha paciencia conmigo. Para mí es un orgullo que él me enseñara, ahora en estos momentos estamos muy acoplados y nos invitan a amenizar reuniones familiares y la gente me pregunta tu hijo te enseñó y yo saco pecho y digo que sí.
¿Qué concepto tienes de esta experiencia?
Que nunca es tarde para aprender.
¿Cuál es la canción que más te gusta?
De todas me gusta el calipso titulada Caroline. Practicamos en familia y él tiene un grupo formado.
¿Cuál es tu sueño?
Que mi hijo sea profesional y un gran músico, que sería un orgullo de Providencia y estamos a la orden para que nos contraten.