Autoridades investigan reales causas del porqué 30 turistas resultaron con alergias en la piel, vomito, y malestar general. El pasado viernes nueve de octubre las autoridades recibieron una llamada de emergencia del personal que se encontraba en el Cayo Acuario puesto que varias personas presentaban sintomatología similar y se podría decir que estaban al parecer intoxicados, malestar ocasionado por consumir un alimento en especial, por ende tenían que ser atendidos con urgencia para que los galenos determinaran que era lo que le sucedía realmente a los 30 pacientes.
En esta situación se activaron todos los mecanismos de emergencia utilizando la ambulancia de la Defensa Civil y del Hospital Amor de Patria, para que el sistema de urgencias no se congestionara; una parte de los pacientes fueron llevados a la Clínica Villa Real donde fueron atendidos.
Según versiones los turistas presentaban hinchazón en su cuerpo, vómito y malestar general en su cuerpo, por ende se dio parte a la autoridad competente para que fueran trasladados hacia San Andrés por el mal estado en que se encontraban aproximadamente 30 visitantes.
Los turistas afectados afirman que hacía pocos minutos habían consumido pescado en el cayo, que al parecer fue el detonante de la situación, dentro de ellos había tres brasileros y cuatro peruanos. Cabe destacar que lo que al parecer produjo la patología fue una toxina que se llama Ciguatoxina que tiene algunos pescados, por ende se recomienda abstenerse de no consumir barracuda, bonito y jurel.
Según informó la Defensa Civil Colombiana, a eso de las tres y media de la tarde el salvavidas que se encuentra en el Cayo Acuario se percató de una situación anormal y solicitó un traslado de unas personas a la isla de San Andrés, ya que se encontraban en mal estado de salud, éstas presentaban malestar general, algunas tenían algún tipo de brote en la piel, por ese motivo se activó el sistema de emergencia, donde participó la Armada Nacional con una unidad de Guarda Costa para realizar los traslados correspondientes.
Hay que resaltar que el mecanismo de socorro y las unidades ante esa situación inmediatamente acudieron de forma oportuna, trasladando a las personas a los diferentes servicios de urgencia.
La autoridad competente se dirigió hasta el cayo Acuario a inspeccionar el lugar y saber de primera mano que circunstancia género dicha situación por ende se está a la espera de los resultados de laboratorio, para saber qué mecanismos de prevención tomar frente a una eventualidad como esta en otra ocasión.
Cuidado con el consumo de barracudas y bonito
La ciguatera es una intoxicación alimentaria de la que se reportan unos 50.000 casos al año, pero hay que tener en cuenta que es un trastorno sub-denunciado y algunas veces sub-diagnosticado. La mortalidad ronda el 5% del total reportado, y se la adjudican al paro respiratorio.
La ciguatoxina o ciguatera es muy común en pescados consumidos en el archipiélago como las barracudas, el bonito y el jurel y por ello desde hace cerca de una década la Secretaria de Salud alertó a la población sobre el consumo de este tipo de pescado, pero parece ser que en algunos restaurantes que atienden sobre todo turistas, se sigue expendiendo en forma indiscriminada.
Éstas se acumulan en la cadena alimentaria marina y hacen más tóxicos a los peces más grandes. Se ignora por qué el pez no se afecta por las toxinas y sí algunos animales, que incluyen varios mamíferos, aves, reptiles, anfibios, insectos y hasta ciertos peces.
Se reporta más toxicidad de estas toxinas en algunas islas tropicales, donde es mayor la fuerza de las olas al dañar a los arrecifes en los que se encuentran macroalgas; las tormentas o ciclones tropicales con lluvias abundantes, terremotos y olas gigantescas, preceden a los brotes de ciguatera; los arrecifes ciguatos pueden luego permanecer tóxicos durante muchos años.
Los vectores actuales para la enfermedad son los peces semipelágicos y los que habitan en los arrecifes coralinos; entre ellos se encuentran la aguja, pez vela, barracuda, dorado, peto, coronado, cubera, mero; aquí intervienen sus hábitos de alimentación, donde se involucran los herbívoros que consumen los dinoflagelados, así como los que forman parte de la cadena alimentaria (piscívoro).
Aunque es endémica de los trópicos y subtrópicos, actualmente la ciguatera se reporta también en áreas no tropicales. Es difícil predecir la prevalencia, pues las estadísticas no son confiables al presentarse en muchos países del tercer mundo, aunque es frecuente en Cuba, República Dominicana, Puerto Rico, la costa sur de los EE. UU. y algunos países con costas o mares indo pacíficos (Hawaii). Las poblaciones más afectadas son los turistas y los que practican la pesquería en estas zonas reportadas.