El mar es una fuente inagotable de agua y, para consumo humano, es necesario desalinizarlo, proceso que en la isla de San Andrés es una realidad con 37 plantas instaladas. Hoteles de la isla ya cuentan con plantas desalinizadoras propias que proveen del líquido proveniente de barrenos subterráneos alcanzando una producción hasta de 150 metros cúbicos diarios. En las residencias ya se cuenta con plantas que permiten desalinizar el agua proveniente de los pozos y del mismo mar con una calidad igual al del agua embotellada que se vende en el mercado.
Por: Daniel Newball H.
Hoy día, cuando la calidad del agua se cuestiona y su cobertura no es la más amplia en las Islas, la alternativa de desalinizar el agua resulta válida y apropiada garantizando un flujo constante del preciado líquido y su reutilización garantizada en muchos hogares y edificios.
Hoteles y residencias ya están accediendo de manera efectiva a nuevas tecnologías que permiten desalinizar el recurso hídrico que puede proceder tanto del mismo mar o desde las cuencas subterráneas, siempre y cuando no se procede a estresarlos por parte de los usuarios, o forzarlos más de su capacidad original.
Para los establecimientos hoteleros, residencias, e incluso empresas de agua que han venido surgiendo gracias a la incursión de estas tecnologías, cuyo costo puedes oscilar entre los $800 mil hasta los $100 millones de pesos, y su uso resulta rentable cuando se trata de costos beneficios para los usuarios.
“En total, en la isla de San Andrés, tenemos instaladas 37 plantas de escala industrial, semi-industrial y casera, de los cuales ya podemos contabilizar unas 23 plantas.
“Ha sido algo novedoso, no es muy conocido en la isla y nos estamos dando a conocer debido a que hemos tenido problemas con los proveedores pero ya tenemos convenios con una empresa japonesa que nos está enviando las máquinas que son muy eficientes y económicas, básicas para lo que todos necesitamos.
“Para poder establecer como se debe desalinizar el agua debemos establecer para que lo necesitamos, si es para el nivel industrial, para la casa o limpiar el acueducto, porque de acuerdo a cada necesidad se cambian los parámetros y los equipos.
“En el caso particular mío, hemos venido trabajando mucho con las casas ya que lo hacemos con barrenos que manejan conductividades entre 1.500 hasta 7.000 litros de conductividad.
“Llegamos a tener aguas con conductividades de 50 micro-simens hasta 120 micro-simens con una calidad igual o superior al que vemos en el agua embotellada que venden a nuestras casas con cinco sistemas de filtración de sedimentos, de carbón y de ión plata, con micro-membranas y de desinfección con luz ultravioleta”, explicó de manera detallada el Ingeniero Químico Giovanni Smith, que ha venido trabajando este sistema en hoteles y residencias del territorio insular de forma exitosa en los últimos tres años.
Una de las empresas que ha venido vinculándose al proceso de forma exitosa ha sido la empresa Balance Water, la cual viene manejando sistemas de desalinización del agua que ya están a la venta en tiendas y supermercados.
“La experiencia ha sido gratificante, hemos tenido, como todo empresario, piedras en el camino ya que en la isla tenemos dificultades grandes porque no tenemos muchos expertos en estas áreas lo que nos obliga a estudiar mucho e investigar, gracias al Internet porque hay mucha información disponible.
“Hemos podido adquirir los equipos en California y con la ayuda de expertos desde Bogotá hemos podido sacar nuestra empresa adelante, estamos desalinizando dos carrotanques al día alzando los 10 metros cúbicos para llenar botellones y también bolsas de agua que estamos introduciendo al mercado.
“En la isla hace falta mucha más agua desalinizada, sobre todo en las casas para el consumo doméstico, estamos recibiendo mucha agua de muchos países pero les puedo asegurar que en Colombia estamos produciendo mejor agua que el de muchos países”, dice María del Pilar Angarita Granados, gerente de la empresa Balance Water que maneja el agua desalinizada a niveles industriales.
El agua del mar tiene sales minerales disueltas. Debido a la presencia de estas sales, el agua del mar es salobre y no es potable para el ser humano y su ingestión en grandes cantidades puede llegar a provocar la muerte.
El 97,5% del agua que existe en nuestro planeta es salada y sólo una cantidad inferior al 1% es apta para el consumo humano. Conseguir potabilizar el agua del mar es una de las posibles soluciones a la escasez de agua potable. Mediante la desalinización del agua del mar se obtiene agua dulce apta para el abastecimiento y el regadío.
Las plantas desalinizadoras de agua de mar han producido agua potable desde hace muchos años, pero el proceso era muy costoso y hasta hace relativamente poco sólo se han utilizado en condiciones extremas. Actualmente existe una producción de más de 24 millones de metros cúbicos diarios de agua desalinizada en todo el mundo, lo que supone el abastecimiento de más de 100 millones de personas.
Las plantas locales ya tienen una vigilancia y escrutinio de la Corporación Ambiental Coralina para evitar estresar las fuentes de agua subterránea garantizando la preservación de los pozos en la Isla.