El ministro de Salud y Protección Social en ejercicio de sus facultades, en especial, de las conferidas por los artículos 69 de la Ley 1753 de 2015, 2.8.8.1.4.3 del Decreto 780 de 2016 decidió prorrogar por dos meses más la emergencia sanitaria por Covid19, la cual se vencia el 28 de febrero del presente año
De acuerdo con el nuevo acto administrativo, con ocasión a la declaratoria de la pandemia por el COVID-19 por parte de la OMS, este
Ministerio declaró la emergencia sanitaria en el territorio nacional mediante la Resolución 385 de 2020, medida prorrogada a través de las Resoluciones» 844, 1462 y 2230 del mismo año, y 222, 738, 1315 y 1913 de 2021, encontrándose vigente esta última, hasta el 28 de febrero del 2022.
Dentro de las fases sobre las cuales se construyó el manejo de la pandemia, el país se encuentra actualmente en la de mitigación, que se caracteriza por la adopción de medidas para reducir el impacto de la enfermedad en, términos de morbi-mortalidad, la presión sobre
los servicios de salud y los efectos sociales y económicos derivados de esta, lo que exige una fuerte corresponsabilidad por parte de los individuos con medidas de autocuidado, de las comunidades y del gobierno, para aislar casos positivos, disminuir la velocidad de transmisión, mantener la oferta sanitaria en los territorios, incrementar el ritmo de la vacunación y lograr con ello la reactivación plena de todas las actividades de los sectores económico, cultural y social.
Para el Ministerio, tanto instituciones académicas nacionales e internacionales como el Instituto Nacional de Salud -INS-, han desarrollado diferentes alternativas basadas en su
mayoría, en modelos matemáticos de tipo comportamental que, con mayor o menor error y sofisticación de las representaciones, apuntan a describir la progresión de los casos. En este sentido, el INS elaboró un modelo determinístico tipo SIR, que divide la
población afectada en tres grandes grupos: a) individuos susceptibles o que pueden contagiarse (S), b) individuos infectados o que son capaces de transmitir la enfermedad (I), y
c) individuos recuperados de la infección o que adquieren inmunidad (R); las estimaciones de
casos nuevos y acumulados diariamente son producto del ajuste al citado modelo predictivo SIR de transmisión estocástico de la COVID-19, con los reportes diarios de casos confirmados de dicha enfermedad.
Que, en este contexto, se evidencia que la situación epidemiológica en Colombia por causa del COVID-19 ha reportado una mejoría progresiva de sus indicadores
epidemiológicos en las últimas semanas, tales como la reducción del número de casos confirmados diarios, el cual pasó de 14.038 casos día en promedio para la semana del 18 al 24 de enero, a un promedio de 8.829 casos día para la semana del 25 al 31 de enero
de 2022; también se ha registrado una disminución en la ocupación de UCI que se ha mantenido por debajo del 65% durante las últimas 2 semanas y, en cuanto a los fallecidos, si bien el comportamiento se ha mantenido estable, se espera que presente una reducción
progresiva como resultado de la disminución de la incidencia. Con corte al 7 de febrero de 2022, las cifras consolidadas evidencian que: i) en Colombia el número de contagios por COVID-19 confirmados asciende a 5.975.786 casos,
de los cuales el 0,9% (53.817) se encuentran activos actualmente, con una tasa de contagio acumulada de 11.783 casos por 100.000 habitantes, ii) se presenta un total de 135.992
muertes acumuladas, para una tasa de mortalidad de 268,17 por cada 100.000 habitantes y una letalidad de 2,28% y, iii) se presenta una ocupación UCI del 63% y por hospitalización
general del 68%.
La variante ómicron continúa representando un desafio a nivel mundial debido a su alta transmisibilidad, aumentando rápidamente los casos de personas contagiadas con
COVID19, con una presentación clínica menos grave, pero que también puede saturar el sistema de salud, en donde el enfoque más asertivo continúa siendo la vacunación y las
medidas de autocuidado para prevenir formas graves de la enfermedad y muerte por dicho
coronavirus, puesto que si bien, en la mayoría de regiones del país parece que se ha
superado el pico generado por esa variante, en otras aún existe transmisión creciente asociada a esta, dado su comportamiento asincrónico.
En Colombia, el Plan Nacional de Vacunación adoptado mediante el Decreto 109 de
2021, modificado por los Decretos 404, 466, 630, 744 y 1671 de 2021, ha venido avanzando
según lo esperado, dado que según el reporte diario de dosis aplicadas consolidado por la
Dirección de Promoción y Prevención de este Ministerio con corte a 14 de febrero de 2022, de las 51.049.498 personas de la población colombiana según el censo del Dane, el 80.6% cuenta con primeras y únicas dosis, el 64,4% tiene aplicada las segundas o únicas dosis y al 22,2% se les ha aplicado el refuerzo; no obstante, existe un porcentaje importante de la
población que no ha completado el esquema de vacunación, la cual se considera más
susceptible al contagio por el virus SARS-CoV-2 y a desarrollar complicaciones graves.
Por esto es necesario mantener las medidas de bioseguridad aunben personas vacunadas dado que: a) debe recordarse que ninguna vacuna tiene una efectividad del 100% en la prevención del contagio, y b) persiste una proporción importante de población no vacunada, bien sea por dificultades de acceso o por no adherencia a esta medida, factores que generan un mayor riesgo frente a manifestaciones graves y mortalidad en caso de contagio, e incrementan la probabilidad de transmitir la enfermedad a otras personas; lo que denota que la pandemia aún no ha terminado y que el virus SARS-CoV-2 todavía representa una amenaza significativa para la población, y de manera correlativa un impacto severo en materia de salud pública.
Conforme con lo expuesto, ante las situaciones de riesgo mencionadas que deben ser atendidas con medidas específicas que se encuentran establecidas en el marco de la emergencia sanitaria, es necesario prorrogarla y mantener las condiciones de prevención y autocuidado que han sido establecidas.
En mérito de lo expuesto, se resuelve prorrogar hasta el 30 de abril de 2022 la emergencia sanitaria en todo el territorio
nacional, declarada mediante la Resolución 385 de 2020 y prorrogada por las Resoluciones
844, 1462, 2230 de 2020, y 222, 738, 1315 y 1913 de 2021.
La emergencia sanitaria podrá finalizar antes de la fecha aquí señalada, cuando
desaparezcan las causas que le dieron origen. Deberá mantenerse el cumplimiento de las medidas contenidas en el artículo 2 de
la Resolución 385 de 2020, modificado por el artículo 2 de las Resoluciones 844 y 1462 de 2020, 222, 738 y 1315 de 2021.