Colombia llegó invicta a la final de la Copa América y con la ilusión intacta para ser campeón pero enfrentarse a Argentina le resultaba adverso en varios aspectos, no obstante que la enfrentó de tú a tú y que incluso tuvo muchos episodios para ganarle y con mayor posesión del balón.
Pero la albiceleste no solo era la actual campeona de Copa América, también lo era de la Copa Mundo, y a su ventaja tenía que si Colombia no lograba ganarle en los 90 minutos de juego reglamentario, difícilmente podrían ganarle.
Primero por que en la definición desde el punto penal, el arquero Dibu Martínez tiene amplia experiencia como atajador de penaltis, gracias a su habilidad, a su gran estatura, y un estilo que infunde temor en los cobradores que lo enfrentan.
Y en juegos con extratiempo, Argentina también tiene amplia experiencia como recientemente aconteció con la definición de la Copa Mundial ante Francia, y esta es la primera vez que la Selección Colombia debe jugar un partido de 120 minutos, lo cual dejó al combinado patrio sumamente agotado con el extratiempo, debido al exceso físico, sumado a que mientras Argentina descansó tres días antes de la final, Colombia solo descansó dos días.
De modo que después que Colombia entró en el extratiempo, empezó a perder posibilidades de ganar la Copa y al final, esa experiencia que se traduce en jerarquía, le dio a Argentina lo suficiente para ganarse su 16 ava Copa América y superar a Uruguay que se queda con quince, así no haya mostrado el mejor desarrollo futbolistico de este certamen.
A ello se le deben sumar los aspectos extra legales, y esta no fue la excepcion. Hubo jugadas polémicas donde el árbitro erró, y al menos en dos faltas en el área que fueron reclamada como penalti, nisiquiera las sometieron a la revisión del VAR.