Ayer antes de la media noche fue ultimado a tiros por un sicario que se le acercó a pie mientras éste charlaba con otra persona, el joven empresario Carlos Gustavo Ramos Carazo, de 34 años de edad, natural de San Andrés y residente en el barrio La Rocosa, luego que un sujeto lo sorprendió sobre la acera derecha de la Avenida 20 de Julio, diagonal a la Iglesia Bautista Central, que le disparó a quemarropa en siete ocasiones.
Los hechos ocurrieron hacia las 11:30 de la noche cuando el joven empresario se aprestaba a embarcarse a su camioneta que permanecía con la puerta abierta sobre la Avenida 20 de Julio, al lado del establecimiento de comercialización de productos Colanta en San Andrés, a pocos pasos del legendario Parque de Bolivar y a unos 200 metros del Comando de Policia y de la sede de la Gobernación de las islas. Su cuerpo quedó atravesado sobre en anden y su pie izquierdo apoyado sobe la pared de un local comercial de la zona. Mientras que el pistolero huyó caminando por un pasadizo que de la vía principal da hacia los barrios Modelo y Guangaro, de acuerdo con versiones de testigos en el sitio de los hechos que dudan de las versiones de una supuesta motocicleta para escapar.
Este es el segundo crimen del sicariato cometido en la Avenida 20 de Julio contra empresarios isleños, ya que el 25 de octubre de 2013 fue ultimado a tiros el también empresario Juan García Jaramillo, miembro de una destacada familia del archipielago, en esa importante artería vial de la ciudad a unos 500 metros de donde se perpetró el homicidio contra Ramos Carazo.
Ramos Carazo era conocido como Carlitos Ramos, para distinguirlo de su padre que lleva el mismo nombre; un destacado empresario del sector de hidrocarburos y energetico en las islas.
De acuerdo con los resultados preliminares del procedimiento de levantamiento del cadáver, al menos seis disparos de bala quedaron alojados en la humanidad del occiso, interesando partes vitales y produciendo su deceso en forma instantánea en el lugar de los hechos, quedando su cuerpo a un lado de una motocicleta Yamaha, tipo turismo Biws.
Esta es la segunda muerte por el accionar de los sicarios en San Andrés en lo que va corrido del mes de julio de 2014 y vuelve a poner de presente la oleada criminal que los escuadrones de la muerte al servicio de las organizaciones criminales, activaron en 2010 en la isla y que ha cobrado varias decenas de victimas en los últimos cuatro años.
Hasta ahora se desconocen los móviles de este nuevo crimen que tiene consternada a la comunidad insular, por cuanto no se conocían dudosos comportamientos del occiso, salvo que en el pasado Ramos Carazo ha estado involucrado en varios accidentes con lesionados de gravedad, cuando conducía vehículos de su propiedad bajo los efectos del licor.
Una de las hipótesis que se aventruran a repetir propios y extraños es que al parecer el joven empresario venía siendo extorsionado y se habría negado a pagar «vacuna» y por esta razón lo habrían ejecutado. La versión encuentra asidero por cuanto la semana pasada la Policía Nacional retomó una campaña de prevención contra las extorsiones en las islas.
La noticia que de inmediato fue divulgada por The Archipielago Press a través de su cuenta de Twitter, provocó rechazo, indignación y consternación de personas de las islas que lo conocieron a través de las redes sociales.