La Corporación para el Desarrollo Sostenible del Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina –CORALINA-como máxima autoridad ambiental del Departamento Archipiélago a través de su Director General Durcey Stephens, hace un llamado de atención a la comunidad de las islas y a los visitantes para evitar malas prácticas con el uso de los recursos naturales, en especial la biodiversidad de las islas.
En los últimos días se ha recibido información de parte de medios de comunicación, que señalan que algunos prestadores de servicios turísticos están utilizando los erizos de mar como “atractivos para turistas” y que después de capturarlos y manipularlos los arrojan sin ningún tipo de cuidado o incluso los sacrifican para obtener huevos. Es importante que se tenga presente que los erizos de mar son indicadores de salud de los arrecifes y por sus hábitos alimenticios favorecen la salud de los ecosistemas marinos (incluyendo arrecifes coralinos y pastos marinos entre otros ecosistemas) y al alterar las condiciones naturales por ejemplo con mala manipulación y muerte, se afectan los procesos naturales y se puede llegar a impactar negativamente todo el sistema.
Es por ello que para esta Corporación ambiental es vital que se eviten estas malas prácticas y que se tenga presente que de acuerdo con la normatividad vigente en las Zonas de Preservación (No entry), Zonas de Conservación (No take) y Zonas de uso especial del Área Marina Protegida Seaflower está prohibida la extracción de cualquier recurso natural, lo cual se puede constituir como un delito ambiental y ante su detección se procederá con todo el peso de la ley (da cárcel).
De igual manera el Gobierno nacional proporcionó herramientas como el Decreto No. 1076 de 2015 y la Ley 1774 del 6 de enero de 2016 para el manejo de fauna silvestre prohibiendo la captura, caza, movilización y comercialización y ante casos de maltrato animal respectivamente, mediante los cuales se pueden imponer multas y sanciones carcelarias, así que hacemos un nuevo llamado de atención para la conservación de la biodiversidad y el manejo de buenas prácticas en la Reserva de Biosfera Seaflower.