La gobernadora del Departamento Aury Guerrero Bowie invitó a toda la comunidad de las islas, y a funcionarios de la Administración Departamental a acompañar a los familiares, amigos y relacionados de los desaparecidos por la tragedia de la embarcación “Miss Isabel”, hechos ocurridos el 5 de enero del año 2012 que dejó varias víctimas mortales.
La celebración religiosa se llevará a cabo el día domingo 5 de enero a las 10:00 a. m. en la Iglesia Bautista de Lynval & Cove. «Su presencia y acompañamiento será de mucho apoyo para los familiares de las víctimas», explicó.
Hechos
Los hechos fueron relatados por el único sobreviviente que vivió la odisea completa de principio a fin y que incluso luchó contra una jauría de tiburones que despedazaron a varios de sus compañeros.
El pescador y marinero, Juan Livingston, vio morir a cuatro de sus compañeros de viaje, después que el buque en el que viajaban, de nombre Miss Isabel con rumbo a Providencia naufragó y, al quedar a la deriva, fueron víctimas de los tiburones.
Todo empezó el pasado jueves a las 5:30 de la mañana cuando siete marineros se embarcaron en San Andrés en el buque Miss Isabel, en el que transportaban, entre otras cosas, con cinco motos y un carro.
Pasadas las 8:00 de la mañana una chispa comenzó a quemar la embarcación y según relató Livingston al periódico The Archipiélago Press, hicieron varios llamados de auxilio que, según él, no tuvieron respuesta de las autoridades marítimas.
Ahí empezaron las 24 horas de terror de Livingston, quien recuerda que el primer ataque lo recibió Charles Whitaker. Luego, el capitán Andy Nelson James.
«Mi amigo Charles gritó: ¡me mordió un tiburón! y cuando fui a verlo no tenía una pierna y Charles empezó a sangrar y a sangrar y lo cogí y seguimos nadando. Luego volvió el tiburón y mordió al capitán James en el brazo y aun así seguimos nadando. Nuestro afán era llegar a tierra».
El tiburón volvió y atacó nuevamente al capitán, mientras que Charles estaba moribundo.
«Tras el segundo ataque el capitán me dice: si me muero trate de llevarme a tierra para que mis hijos me velen. Luego le cerré los ojos a Charles y al capitán. En la noche el tiburón se llevó a Robert Bent y quedamos solamente Enrique Meza y yo, pero él venía muy mal, estaba vomitando».
Livingston amarró al Capitán a su cuerpo y nadó con él para tratar de cumplirle la promesa. Sin embargo, las condiciones del mar no eran las mejores y al marinero le tocó seguir sin su amigo.
«A las 4:30 de la mañana del viernes llegué con Meza a la playa y nadie nos estaba esperando. Meza ya estaba muerto cuando llegó la ambulancia», contó el pescador sobreviviente.
Los marineros Arístides Salinas y Emerson Bowie Mitchell fueron rescatados con vida porque se apartaron del grupo sobre el mediodía de aquel jueves.
El incidente generó algunos reclamos de la comunidad de San Andrés por la aparente lentitud de la Armada en la atención del naufragio, ya que solo hasta la tarde del jueves se supo de la gravedad del hecho.
El capitán de navío, Gabriel Pérez, quien para la época de los hechos estaba a cargo del Comando Específico de San Andrés de la Armada Nacional, explicó que sólo hacia las cinco de la tarde del jueves les reportaron que un buque estaba a merced de la corriente y de inmediato activaron la señales de alerta y se inició la búsqueda.
«Estoy seguro de que el capitán del buque hizo todos los intentos de llamar por radio. No sabemos ese mensaje de auxilio por qué no llegó. Sin embargo, la reacción de las unidades nuestras en el momento en que supimos del incidente fue muy rápida, en cuestión de 40 minutos encontramos el buque».
La Capitanía de Puerto de San Andrés inició las investigaciones relacionadas con la emergencia. Del hecho, la Armada destacó que el buque estaba autorizado para zarpar con tres tripulantes. El oficial destacó que en 2011 la Armada Nacional rescató siete buques y 14 personas y en el 2010 rescató 11 embarcación y 51 personas.