La restricción de parrillero en las horas de la mañana afecta movilidad. Llevar pasajeros al aeropuerto o estacionarse en los hoteles y almacenes de la localidad resulta más rentable para los taxistas que estar circulando en las calles recogiendo pasajeros. Blas Almeida, taxista: “En ocasiones vienen los turistas pero muchas veces, y como vienen con todo incluido, no cogen ni el transporte de modo que no se gana mucho dinero. Ganancias entre los $50 mil y los $100 mil pesos diarios pueden estar ganando los taxistas por estar estacionados tanto en los almacenes como en los hoteles, contando con indumentaria y servicio personalizado a los turistas locales y en carros bien presentados.
Por: Daniel Newball H.
Muchas han sido las ocasiones en las que el Secretario de Movilidad Departamental, Daniel Pechtalt García, insistió en que las medidas que se adoptaron de restricción de parrillero en motocicleta en la isla de San Andrés se implementaron para “garantizar que todos los actores involucrados en el sector del transporte puedan tener participación en el gran ponqué y puedan salir de sus problemas económicos pagando sus obligaciones como transportadores”.
Sin embargo, y pese a las quejas de los ciudadanos quienes reclaman que permitan una mayor movilidad de los mototaxistas debido a que les resulta más económico y más funcional, debido a que los taxistas en carro no incursionan en muchos sectores de la isla, los conductores de taxi manifiestan que es más rentable poder trabajar directamente con los hoteles y con los almacenes de la isla, teniendo como pasajeros potenciales a los turistas, que circulando por las calles de la isla buscando pasajeros.
“Aquí hay días que le va a uno medio-bien, hay días que se hace plata al igual como no se hace plata. En un día podemos hacer $60 mil o $70 mil pesos o en ocasiones se pueden hacer $20 mil pesos, eso de acuerdo a como sale la gente aquí o como la gente venga a comprar al Centro.
“En ocasiones vienen los turistas pero muchas veces, y como vienen con todo incluido, no cogen ni el transporte de modo que no se gana mucho dinero.
“De las ganancias que me hago, por ejemplo $50 mil pesos, debo echarle gasolina al carro, son veinte o treinta mil pesos, y por ahí debo guardar para algún repuesto y la batería. Prácticamente, entonces, vamos con $20 mil pesos para la casa y en un mes nos hacemos $600 mil pesos entonces, en ocasiones, nos toca trasnochar y hacer algunos turnitos en el aeropuerto para llevar el sustento para la casa”, dice Blas Almeida, taxista que permanece estacionado en los alrededores de la esquina donde está ubicado el Almacén Classic y que diariamente permanece junto a sus compañeros uniformado y bien presentado gracias al apoyo que reciben de algunos propietarios de almacenes que les brindan la indumentaria para poder laborar.
Los alrededores del Hotel Sol Caribe Centro, en el sector de North End, es otro punto de congregación de taxistas, los cuales se turnan para llevar pasajeros al aeropuerto logrando ganar buenos dividendos para ellos y sus familias, restando cualquier tipo de interés en estar en las calles llevando pasajeros residentes. “Algunas veces hacemos $100 mil pesos, todo depende del movimiento que hay en el hotel ese día. Diariamente llevamos varios pasajeros en cada viaje, en ocasiones llevamos cuatro o cinco personas en el carro, todo depende.
“Salir a la calle a recoger pasajeros no alcanza a cubrir los gastos que tiene el carro que tengo. A la gente uno la ve esperando diariamente en los lugares pero ellos esperan al mototaxi, no esperan que uno los lleve.
“Para nosotros no es rentable salir a la calle a recoger gente porque gastamos en gasolina, hacemos una inversión que no recuperamos porque la gente no toma el carro para transportarse, prefieren la mototaxi para hacerlo.
“Sinceramente, y como sugerencia al Gobierno, no veo ninguna posibilidad para nosotros porque estamos viendo que los hoteleros están trayendo buses de afuera y eso es privado, eso deberían prohibirlo para funcionar en la isla. Los traen empresas de afuera y dejan a los isleños pasando hambre”, afirmó Realdo Martínez, quien junto a otros 10 taxistas se apostan en las afueras del Parqueadero del Hotel Sol Caribe Centro para recoger y llevar pasajeros del hotel.
Los mototaxistas expresan el clamor que muchos ciudadanos tienen en materia de transporte pero requieren de un respaldo ciudadano ya que se sienten solos en la lucha.
“Vemos que los taxistas no llevan a nadie que no sea turista, el Gobierno sale a defenderlos diciendo que la restricción es para que ellos y los buseteros ganen pero vemos que los taxistas solo llevan a los turistas y los buseteros solo sacan algunos vehículos y pasan llenos.
“La gente necesita moverse y no saben el daño que cometen con la restricción pero si la gente no reclama mucho menos el Gobierno local va a responder a las necesidades de transporte. Necesitamos el respaldo de la gente”, afirmó Luis Góngora, mototaxista local que dice no arriesgarse a ganarse un comparendo de la Policía por lo costoso que es y porque el mototaxi es su medio de subsistencia.
El decreto de restricción de parrillero se extiende por un año, se vienen ejerciendo controles al filo de las nueve de la mañana hasta las 12 del mediodía por parte de la Policía con patrullas móviles pero desde ya se ven serias afectaciones a la movilidad que deben ser atendidas por parte de las autoridades locales en aras de garantizar la movilidad en la isla de San Andrés.