(Foto de ilustración tomada de Internet) El pasado 29 de enero del presente año se realizó la audiencia de juicio que concluyó con la condena de Gerson Cuesta Castro, quien deberá pagar 188 meses de prisión, es decir 15 años y medio de cárcel como autor material del crimen de un joven al que asesinó en el barrio Modelo de esta ciudad el 9 de agosto de 2015.
La audiencia no tardo más de 45 minutos porque el sentenciado ya había aceptado con anterioridad su culpa en el delito de homicidio y tráfico y porte de arma de fuego. Cuesta admitió su participación en el asesinato de Letherman De La Peña Rithie, acción que se registró el 9 de agosto de 2015, en el barrio Modelo primera Etapa, por tal razón el Juzgado primero del circuito decidió otorgarle esta pena gracias a que éste se entregó voluntariamente a las autoridades, pero a la vez también se le negó cualquier otro beneficio a pesar que el abogado defensor en sus alegatos expresó que, Cuesta en el momento de los hechos actuaba con miedo porque sentía que estaba en riesgo su vida, sin embargo esta condición no fue tomada por el juez, debido a la ubicación donde impactaron los proyectiles del arman daban a entender que hubo intención de hacer daño.
La confesión
Gerson Cuesta Castro, identificado con la cédula de ciudadanía número 1.123.626.314 de San Andrés Isla, había comparecido en audiencia judicial y pública ante el Juzgado Tercero Promiscuo Municipal con Funciones de Control de Garantías, en la que la Fiscalía le endilgó los delitos de ‘Homicidio’ en concurso con ‘Fabricación y Porte de Arma de Fuego y/o Municiones’, una vez imputado de los cargos anteriores, el procesado aceptó su responsabilidad en los hechos investigados, por lo que en adelante se hará acreedor al 50% de descuento de la pena que le imponga próximamente un juez de conocimiento.
Tras la previa solicitud de la Fiscalía, la Juez de la causa le dictó ‘Medida de Aseguramiento’ en el establecimiento carcelario ‘Nueva Esperanza’. El delito de ‘Homicidio’ tiene una pena que va desde los 208 hasta los 450 meses de prisión, es decir, de 17 a 37 años de prisión según lo contempla el Código Penal Colombiano.
Gerson Cuesta Castro, un joven de apenas 25 años de edad, quien se venía desempeñando laboralmente como barman y mesero de una cadena hotelera, con un hijo de la unión con su compañera sentimental, una joven isleña, y residente en el barrio ‘Cartagena Alegre’, en testimonio rendido ante la Fiscalía relató que ese día domingo 9 de agosto, en horas de la tarde, había decidido compartir con su familia en la ‘zona rosa’ de ésta isla, hasta que varias horas después, felizmente se dirigió a su residencia. Hasta ahí todo bien. A eso de las diez de la noche, decidió disfrutar de la rumba que ofrecía el pickup ‘El Mayor’ en el barrio ‘El Cliff’ y junto a unos amigos se dirigió a ese lugar, donde departió por unos minutos. En plena fiesta y bullicio, propios de la sabrosura del sonido musical del pickup, y en un momento desafortunado, de manera desprevenida, tropezó sin intención a otro de los espectadores, Lehderman De La Peña Ritchie, quien también disfrutaba de la rumba picotera. Gerson Cuesta Castro, le ofreció disculpas, pero, Lehderman no las aceptó, se molestó y estalló, se fueron a las trompadas, e intentó sacar el arma que llevaba a la altura de la cintura, pero, los amigos del uno, y del otro, decidieron intervenir y aplacar la situación.
Los amigos de Lehderman, le dijeron que hasta allá, no procediera, y que además, el muchacho le había ofrecido disculpas. Por su parte, los amigos de Gerson, lo apartaron y le dijeron que lo iban a llevar a su casa, como en efecto sucedió. Lehderman, en la despedida, habría amenazado verbalmente a Gerson, advirtiéndole que si lo veía por la calle lo iba a joder. -Gerson, se timbró con la amenaza y se azaró- Dirían los muchachos. Gerson, una vez en su casa, vino a su mente la imagen amenazante de Lehderman, según su propio testimonio, era un reconocido bandidito de la isla, digno de temer, y sabía que lo ofrecido por éste, lo cumpliría violentamente. Entonces, Gerson, angustiado y con tantas preocupaciones en su cabeza, tomó una decisión incorrecta y definitiva. Salió de su casa, y se dirigió a conseguir un revólver, y lo obtuvo. Se fue a buscar a Lehderman, y le informaron exactamente donde se encontraba su objetivo. Lehderman, caminaba por los callejones del barrio ‘Modelo’ rumbo a su residencia y escribiendo en su celular, cuando fue interceptado por Gerson Cuesta Castro, Lehderman intentó sacar su arma, pero Gerson, se le adelantó y le propinó un balazo en la frente y otro en su brazo derecho. Herido de muerte, Lehderman, se desplomó boca abajo sobre el pavimento de aquel estrecho callejón. Una vez cometido el crimen, Gerson, narró a la Fiscalía que salió despavorido del barrio ‘Modelo’, tomó la calle del ‘Carmelo’, dobló por la rotonda de ‘Rock Hole’ y se desplazó por la ‘Calle de las Proveedoras’, y por allí mismo, arrojó el arma homicida. Se fue para su casa, y se encerró.
En su relato a la Fiscalía, narró que al día siguiente escuchó todo lo que se hablaba públicamente sobre el homicidio ocurrido en el ‘Barrio Modelo’, entonces, se sinceró con su padre, y le contó que él, era el autor de esa muerte. Ante semejante noticia, el padre angustiado, pero manteniendo la calma, le dijo que había que buscar ayuda, y asesoría con un abogado, para entregarlo a la Fiscalía, como en efecto sucedió, y teniendo en cuenta que la familia del occiso es muy vengativa -según sus propias palabras- y advirtió que ya le habían hecho varios disparos con arma de fuego a su compañera sentimental; y que además, la hermana del occiso, lo andaba buscando armada. Presionado se entregó voluntariamente y confesó al ente investigador con detalles los hechos acaecidos antes, durante, y después.