“Las cosas no son como las contó el pariente de la paciente”: asegura. Luz Marina Howard Salguedo, enfermera jefe del Hospital Departamental Amor de Patria, salió al paso de las acusaciones que en su contra hizo el señor Danny Álvarez Insignares, quien la acusó ante la Fiscalía y ante una Inspección de Policía de haberlo amenazado y maltratado en su condición de familiar de una paciente que está recluida en el centro hospitalario por problemas de diabetes.
Howard Salguedo afirmó a esta redacción que “el pasado 2 de mayo el familiar de la señora Nora Insignares hospitalizada en el servicio de Medicina interna habitación 404 B, “me agarró fuertemente del brazo derecho y me haló bruscamente dejándome marcas, porque quería que le entregara el teléfono de la institución, yo estaba hablando por teléfono con el Dr. Bush y el familiar manifestó de forma grosera que quien le garantizaba a él que yo estaba hablando con el ortopedista, le respondí diciéndole que yo no tenía por qué mentir. Él quería sacarme de la habitación para que le respondiera yo no me atreví a salir, pero cuando me atacó corrí a buscar ayuda y llamar al vigilante, temiendo por mi seguridad, en el momento se encontraba presente Danford Reid, quien reaccionó en mi defensa, al igual que las auxiliares que hacen turno conmigo, el familiar agresor me siguió al estar de enfermería irrespetando al personal sin medir palabras tono de voz y amenazas de agresión física.”
Esta versión hasta ahora no la había contado Howard Salguedo, no obstante que el caso terminó en la Fiscalía y en la Inspección de Policía, a cuyos documentos firmados por las partes, accedió la redacción de The Archipiélago Press. Tal como lo reveló esta redacción, el pasado 12 de mayo la Fiscalía General de la Nación le recibió la querella a Álvarez Insignares, la cual trasladó a la Inspección de Policía para establecer una caución a efectos que cesen las amenazas y agresiones en su contra. Allí declaró haber recibido amenazas e insultos por parte de la ciudadana Luz Marina y el señor Walford, quienes laboran en el hospital Amor de Patria, por problemas de intolerancia.
De igual forma a la Inspección de Policía a cargo de Ching Sang Jay Padilla debieron comparecer Danny Álvarez Insignares, su hermana Mayelin, la jefe de enfermeras Luz Marina Howard Salguedo y Danford Reid Henry, para evitar que la situación más adelante tenga una lance personal desgraciado.
Álvarez Insignares también llenó un formato de quejas y reclamos de la Secretaria de Salud del Departamento, donde expresa que “ha pasado por múltiples inconvenientes durante el tiempo de hospitalización de su señora madre Nora Isabel Insignares Esparragosa, presenta inconformismo con la calidad de la prestación del servicio y la atención al usuario por parte del personal de salud a cargo de su mamá, en especial de los señores: enfermera jefe del cuarto piso, Luz Marina y del señor camillero Walford. Expresa maltrato físico y verbales, mala praxis de sus funciones, que ha hablado con la parte administrativa, han llegado a acuerdos que no se cumplen violando sus derechos de visitas de acompañamiento de su señora madre, ya que el usuario dice que los médicos dicen que la paciente amerita acompañamiento 24 horas por su edad y estado de salud”
La versión del Jefe de Enfermeras
Howard dijo que “solicitó que este señor no se le permita quedar en el hospital en calidad de acompañante permanente ya que no es la primera vez que agrede al personal y todas estamos temerosas de sus reacciones.
Es de resaltar que Howard también interpuso denuncia el pasado 2 de mayo en la Fiscalía Local, afirmando que Dannys Álvarez es una persona muy agresiva quien la maltrato física y verbalmente”, según declaraciones de la enfermera ante las autoridades. Howard le contó a esta redacción que la versión que él dijo solo fue un acomodo de las cosas, pero los hechos reales eran otros, “queremos dejar sentado que las cosas no son como se describen en dicha redacción pasada, ya que fue el señor Danny Álvarez Insignares quien nos agredió y amenazó por el hecho de informarle que no podía ser el quien se quedara como acompañante de su madre ya que por protocolo e intimidad del paciente un hombre no puede ser acompañante cuando en la cama de al lado reposa también una mujer.
En ese instante Álvarez, agarró por el brazo dejando un moretón que le duro días para desaparecer con el fin de retirar a la enfermera Luz Howard de la habitación quien se encontraba atendiendo. Desde el mismo instante que sucedieron los hechos nos vimos en la penosa decisión de retirarnos del servicio para no tener contacto directo con este familiar ya que siempre manifestó su agresión contra nosotros y las amenazas trascendían del ámbito hospitalario, puesto que también amenazó a nuestros familiares, por lo que él manifiesta que los familiares de Danford Reid, lo esperaban para agredirlo, siendo esto totalmente falso.
En el momento que el vigilante le pide que abandone el hospital debido a sus agresiones este pone histérico y empieza agredir a todo el personal de enfermería. Además manifiesta mala práctica también es totalmente falsa porque su madre fue atendida con el profesionalismo que caracteriza a la enfermera a pesar de las agresiones verbales y físicas de parte de ellos.
“Todo paciente es atendido con la misma igualdad y dignidad que requiere ya que somos personas profesionales en cuidado del paciente y tenemos claro que en el hospital se brinda un trato digno y amable a todos los pacientes que necesitan de una mano amiga para poder sanar su enfermedad. Con todo esto nosotros queremos dejar claro a toda la comunidad que las palabras redactadas por Álvarez no son totalmente ciertas porque bien claro si es que no podemos dejar que familiares de pacientes nos agredan, cuando nuestra función es brindarles la mejor atención a sus pacientes”, dijo.
Por su parte el camillero Danford Reid Henry, con 27 años de experiencia, asegura que fue víctima de insultos por el simple hecho de tratar de proteger a su compañera la enfermera atacada. Aseguró que nunca trató, ni él ni su familia, de atacar a nadie y que por eso es que solicitó a la Inspección de Policía que interviniera.
No obstante hay que indicar que Álvarez Insignares trabaja en un edificio del sector de Hansa donde sus compañeros e inquilinos dan cuenta de lo amable y educado que actúa éste en su trabajo, de lo cual en numerosas veces The Archipiélago Press lo ha podido atestiguar, y por su condición de pariente de un paciente tampoco se le puede negar el derecho a visitar y acompañar a su familiar, máxime tratándose de su progenitora.