Indudablemente que el gran ganador del pasado domingo con la elección del mandatario electo Ronald Housni Jaller es Aury Guerrero Bowie, la actual gobernadora del Departamento Archipiélago de San Andrés y Providencia por tres razones.
Primero porque en los últimos 18 años logró mantener para su partido el primer cargo departamental que se venían alternando cada periodo el Partido Liberal e Integración Regional en una especie de Frente Nacional criollo por vía del sufragio.
Lo segundo porque puede respirar tranquila y pude salir a darse un año sabático con paz necesaria para saber que no tendrá en el Coral Palace a un gobernante hostil que pretenda poner el espejo retrovisor para culparla de los males que no pueda enmendar quien esté de turno, o rebuscándole errores para tratar de “empapelarla”
Y tercero porque al ser el candidato de su partido queda con la tranquilidad de saber que su obra de Gobierno no solo va a ser cuidada, si no que va a ser terminada y que no tendrá que enfrentar la mezquindad de un gobernante que se querra dar los méritos de las obras que se entregarán el año entrante, y que además le reservará un puesto de honor en cada acto inaugural para el justo reconocimiento a quien las gestionó y ejecutó pero que no pudo entregar.
Y una cuarta razón que podríamos sumar al triunfo de la saliente mandataria es que le correspondió presidir estas elecciones regionales y puede entregar un parte de satisfacción al Gobierno central, porque las mismas transcurrieron en absoluto orden, sin alteraciones de ninguna índole y entrega una renovación de autoridades departamentales y municipales
Ya habíamos advertido en este mismo espacio editorial que la continuidad de la actual obra de Gobierno era necesaria a efectos de lograr consolidar procesos que actualmente están en marcha y que deben concluir sin mezquindad ni afán de vanidad de quienes quieren mostrar obras que solo ellos hayan hecho.
El Gobierno que va de salida ha iniciado una serie de acciones que bien vale la pena que se le dé continuidad como el caso de los tres mega colegios que no alcanzarán a ser terminados al 31 de diciembre de 2015, las obras del alcantarillado de los barrios de la margen occidental de la pista del aeropuerto Gustavo Rojas Pinilla (Natania, School House, Modelo II etapa, Back Road, Canteras y Lox Bight), el Green Moon Festival, el saneamiento de las finanzas públicas, la renovación urbana, la adecuación de edificios públicos, vías y andenes y los programas Vive Digital (internet subsidiado, aulas y kioscos virtuales, emisoras escolares, tablets educativas, wifi público y aulas móviles digitales), entre otros muy buenos programas que deja andando el Gobierno de Aury Guerrero Bowie.
Y en el plano político puede decirse que la mandataria saliente también triunfa por que mantiene intacto el record del gobernante isleño más votado en toda la historia del Departamento; un record que antes de ella ostentaba con cierto asomo de vanidad el ex gobernador Leslie Bent Archbold, pero que ya de lejos superó Guerrero Bowie y con el valor adicional de haber podido terminar su mandato completamente y con una obra de Gobierno visible en un momento histórico para las islas por las dificultades causadas por el fallo de la Corte Internacional de Justicia, en donde la mandataria logró asumir un papel de liderazgo que la ha hecho visible ante instancias internacionales como la misma CIJ (La Haya), ONU, FAO, Unesco y por supuesto ante el concierto nacional.
PD: La elección de Ronald Housni Jaller el pasado domingo derribó un mito que algunos sectores politiqueros han promovido siempre en aplicación del principio de “divide y reinarás” y que para nuestro caso anunciaban a boca llena desde la campaña gallardista de que “la comunidad raizal no permitiría elegir a un turco”.
A Housni Jaller lo eligieron raizales, residentes (mal llamados pañas) y extranjeros (mal llamados turcos), y por ello el gobernador electo debe gobernar para todos con equidad, responsabilidad y solidaridad.
Prueba de que los raizales le votaron a Housni Jaller fueron no solo las votaciones obtenidas en sus puestos de votación como Providencia, San Luis y La Loma, si no los muchos candidatos raizales que apoyaron su candidatura, y los muchos simpatizantes en esos sectores tradicionales que colgaban sus afiches y vallas en sus patios o las puertas de sus casas. Solamente en Providencia donde la población raizal es casi del cien por ciento, fue la segunda votación con 914 votos y superado apenas por 18 votos por la raizal Susanie Davis Bryan e incluso ganándole a un candidato con ancestros en Providencia como Everth Hawkins que obtuvo 682 votos.
De modo que es otro mito político que se derriba y la oportunidad de que como lo hizo Simón González Restrepo, gobierne para todos y con todos en procura de una mejor calidad de vida de todos y de mejorar las condiciones generales de las islas. Nuestras batallas no tienen que ser entre nosotros mismos si no contra los intrusos, los ilegales que pretenden llegar a las islas a desplazarnos y quedarse, asi como contra las acciones colonizadoras que Bogotá pretenda imponernos. Por lo demás lo que corresponde es trabajar todos unidos por sacar adelante las islas: “turcos”, “pañas” y raizales.