‘Fue muy duro para mí, verme descalificada, destituida, y condenada’. «Recibo este despacho completamente congestionado, con diez meses de atraso, con procesos que yo dejé proyectados en las decisiones, y me están entregando el despacho con esos mismos procesos que no han salido porque desafortunadamente no hubo una buena administración de justicia en este despacho durante estos meses. Con todo respeto lo digo”.
AGG/Redacción judicial.
Con una fuerte convicción en el creador, y absolutamente humana y madurada en el escarnio público, esta mujer proveniente de una familia de abogados Manizalitas, y servidores públicos llegó blindada contra todo lo que manifestó haber sufrido, luego de haber sido restituida por la Corte Constitucional en el cargo de Magistrada del Tribunal Superior del Distrito Judicial de San Andrés, y tras encontrarse diez meses por fuera del cargo. Es una entre los nueve hermanos de una familia paisa que integró Jaime y Libia. Es hija de Jaime Echeverri, ex parlamentario Caldense encargado en los años 70’s de proyectar toda la reforma para la Contraloría General de la República. La Magistrada Patricia Chávez Echeverri fue el mejor promedio de su generación y tras cursar sus estudios superiores en la Universidad de Caldas, es la primera en graduarse. Creó la primera Comisaría de Familia de su ciudad natal y calificada como la mejor del país. Fue varias veces Fiscal, fue profesora de derecho laboral en Medellín, trabajó varios años con su padre como abogado penalista, asesora en varias entidades bancarias, efectuó varios post grados en derecho de familia, y entró por concurso a la administración de justicia y obtuvo el primer lugar en puntaje, siendo siempre calificada en excelencia.
La decisión de la Corte.
En la suspensión de la sentencia dictada el 12 de julio de 2012, la sala octava de Revisión de la Corte Constitucional, en el proceso de revisión adelantado en el expediente acumulado T-3.849.017, resolvió decretar como medida provisional, la suspensión de la ejecución de la sentencia dictada el 12 de julio de 2012 mediante la cual la sala jurisdiccional Disciplinaria del Consejo Superior de la Judicatura le impuso a la accionante Patricia Chávez Echeverri, la sanción de destitución del cargo e inhabilidad general por el termino de diez (10) años. En consecuencia, la sala declaró sin efecto la decisión tomada por la plenaria el tres de octubre del año 2013, en la que en cumplimiento del parágrafo del artículo 172 de la ley 734 de 2002, determinó la fecha en que iniciaría la sanción de destitución que le fue impuesta. Bajo esas condiciones en cumplimiento de lo señalado en el auto de 20 de mayo de 2014 proferido por la Sala Octava de Revisión de la Corte Constitucional, la Sala Plena de la Corte Suprema de Justicia dispuso que podrá usted reintegrarse de manera inmediata al cargo de Magistrada de la Sala Única del Tribunal Superior del Distrito Judicial de San Andrés.
Los hechos.
La historia de su destitución por la Corte Suprema de Justicia se remonta a un caso de unos lancheros que en 2006 dijeron haberse encontrado unos dólares en el mar, y en momentos cuando no estaba muy claro el procedimiento para probar el relativamente nuevo delito de lavado de activos. La jurisprudencia inicial se cambió y trajo consigo toda una avalancha de consecuencias para aquellos administradores de justicia que como Patricia Chávez Echeverri, decidieron en una u otra forma.
El reintegro de la Corte
La Magistrada Patricia Chávez Echeverri, aclaró cómo fue el proceso de su reintegro a la administración de justicia: -“Fui reintegrada el lunes primero de septiembre de 2014. Hay que darle gracias a Dios, porque hay que darle el testimonio es a Dios de una medida provisional de reintegro que me profirió la honorable Corte Constitucional en aras de evitar que se vulneraran ó se siguieran vulnerando derechos fundamentales al considerar que había una duda razonable en mi favor en el que si se debieron aplicar los precedentes jurisprudenciales vigentes para el 2006. Quiero referirme sobre los precedentes jurisprudenciales y aclararle a la comunidad Sanandresana que el delito de ‘Lavado de Activos’ es un delito nuevo en nuestro país, que cuando se fallaron tres delitos de lavado de activos en nuestra comunidad por el Tribunal Superior del Distrito Judicial de San Andrés, en los tres casos de los cuales fui ponente la Corte Suprema de Justicia en su ‘Sala Penal’ al principio tuvo como orientación para fallar un caso de unos italianos en virtud de los cuales cogieron a una señora con un abrigo de piel que tenía muchísimo dinero en el abrigo, la Corte Suprema de Justicia dijo que por el principio de inocencia y por la obligación del ente de la fiscalía de demostrar la comisión del delito y no cumplir con esta demostración entonces no se podía condenar a esas personas pese a que llevaban muchísimo dinero y lo trataban de ingresar por el aeropuerto ‘El Dorado’ en Bogotá. Nosotros con fundamento en ese principio y en esa orientación jurisprudencial consideramos que a los lancheros a los cuales solo se les encontraron sesenta mil dólares y que dieron una justificación en nuestra comunidad razonable que se encontraron dinero en el mar, que todos los que vivimos aquí sabemos que eso es normal, creímos en su inocencia, no demostró la Fiscalía para ésa época que ése dinero provenía del narcotráfico ó la comisión de otro delito, de que fuera entonces posible ó debía condenarse por lavado de activos y exoneramos tanto en la primera como en la segunda instancia a los lancheros. Debo aclarar que en presentes jurisprudenciales posteriores mí honorable superior cambió de postura en considerar en términos prosaicos que ya es a la persona que tiene dineros la que debe demostrar su buena procedencia, es decir, la Fiscalía no tiene esa carga de demostrar la mala procedencia del dinero, sino que la persona que tiene dinero en su poder debe demostrar cuál es la fuente por la cual ese dinero llegó a sus manos. Cuando se nos juzga entonces hay una orientación distinta, hay una postura jurisprudencial distinta y obviamente si esos lancheros no demostraban como habían adquirido esos dineros, pues obviamente, se creaba una duda para la última orientación jurisprudencial mediante la cual se debía entonces condenar por el ‘Lavado de Activos’. De todas maneras nosotros sabemos como comunidad Sanandresana que aquí en nuestras playas se encuentran dólares, o sea, para nosotros es razonable que una persona nos diga me encontré estos dólares. No significa entonces que esa persona pueda ser calificada ni como narcotraficante ni como una persona que secuestró”, manifestó.
El paso por el desierto
Así se expresó la Magistrada Patricia Chávez Echeverri, al ser abordada por esta redacción: -“Durante esos diez meses debo decir que pasé por el desierto. Cuando Dios nos permite pasar por el desierto es porque tiene un propósito especial en nosotros. Debo decir que durante esos diez meses fui formada más como la hija de Dios, como la sierva de Dios, fue fortalecida mi fé, fui probada y moldeada durante esos diez meses como sabemos todos los que conocemos de Dios, que Jesucristo incluso antes de iniciar su vida ministerial también pasó por el desierto y nosotros los hijos de Dios también pasamos por el desierto porque Dios quiere quitar muchas cosas interiores, poner otras y sobretodo demostrarnos que él es el que todo lo puede y solamente nosotros podemos llegar a ese conocimiento si somos probados. Porque si no nos falta nada y no nos pasa
nada malo e injusto ¿Para qué necesitar de Dios? Pero, cuando pasamos por esas pruebas necesitamos de Dios, conocemos a Dios y nos unimos más con él. Tengo este cargo por una misión porque me considero una herramienta de Dios y es Dios quien me dirige en este cargo, es la justicia de Dios, respetando obviamente la justicia y las normas del hombre porque en eso me ha formado Dios, el que debe ser glorificado en este cargo no es Patricia Chávez Echeverri, es una sierva que puso Dios en este cargo, y que si me costara la muerte o la vida o me costara lo que más amo, créame, lo voy hacer, porque es en últimas a Dios a quien nosotros le rendimos cuentas. Dios me dijo, porque fue muy duro para mi verme descalificada, verme destituida, verme condenada a estar por fuera de la administración más de diez meses y fui cuestionada por muchas personas y razonablemente respeto a los que me cuestionaron, porque si yo veo que a una persona se le destituye y se le saca de la administración de justicia como me sacaron a mí hay una duda sobre su honorabilidad, sobre su credibilidad, sobre su trabajo, sobre su lealtad, sobre su capacidad para desempeñarlo, pero Dios me dijo y me enseño que lo importante es que no te destituyan del tono de la gracia ‘No Sufras’ porque humanamente se sufre por lo que los demás piensen de mí, ‘No Sufras’ como te miren, como te traten, como te insultan, como se burlen de ti, porque todo eso lo viví, piensa más bien que es tu padre celestial el que piensa de ti, y eso me llenó. Señor, tú que piensas de mí, y él me dijo que soy una mujer incorrecta e imperfecta, pero no soy una mujer corrupta, nunca lo seré, no lo he sido, y nunca, nunca lo seré.
Despacho congestionado
La Magistrada Chávez, nos confirmó haber recibido un despacho patas arriba: -“No soy una mujer perezosa para trabajar ahora recibo este despacho completamente congestionado, recibo este despacho con diez meses de atraso, recibo este despacho con procesos que yo dejé proyectados en las decisiones, y me están entregando el despacho con esos mismos procesos que no han salido porque desafortunadamente no hubo una buena administración de justicia en este despacho durante estos meses, con todo respeto lo digo. Mi proceso ha sido largo, esto se dio desde el 2012, y, con la acción de tutela que interpuse entre nuevamente a la administración de justicia y durante esos cuatro o cinco meses que entré a la administración de justicia falle ciento cincuenta negocios. Cuando salgo nuevamente en octubre del año pasado dejé diecinueve negocios en mi despacho, de esos diecinueve negocios en mi despacho dejé seis negocios proyectados, y recibo ahora después de diez meses más de setenta negocios para fallar. ¿Cómo pude fallar ciento cincuenta negocios en cuatro meses? Porque soy responsable, recuerdo que me puse una jornada de trabajo de las siete de la mañana hasta las diez de la noche, llegar a mí casa a esa hora, lavar, comer algo, y seguir trabajando hasta las tres de la mañana, para levantarme madrugada. Hablé con mi pastora Jacqueline Dimas, y le dije pastora tengo que darle prioridad a esto, y conté con su comprensión. Eso me costó mi vida ministerial, mi vida familiar, mi vida personal, y es que no podía hacer otra cosa, esto es una injusticia, las personas esperando una decisión y yo en la calle o haciendo otras cosas que como ser humano tengo derecho hacerlo hubiese tenido que represar procesos, por el contrario se le dio prelación a la administración de justicia, conté con un excelente equipo, gente que se sacrificó conmigo para poner todo al día y con mis compañeros de sala también conté y espero contar”, reiteró.
Para que San Andrés cambie
En su mensaje a los habitantes de las islas, y teniendo en cuenta la actual realidad violenta e insegura de San Andrés la magistrada Chávez, dijo: -“Desde la posición donde Dios lo haya puesto, usted tiene una misión, usted no tiene un trabajo, usted no tiene una posición, usted no tiene poder, usted tiene una misión que cumplir, y una misión es una tarea que Dios le delega a usted para cumplirla. Y, ¿Porqué es una tarea? Porque la tarea la hacemos no conforme nosotros pensemos y sintamos, sino desde nuestra propia carne que es incorrecta. La tarea nosotros la hacemos es desde los principios de Dios, desde la comunión que nosotros tenemos con el señor y el señor nos revele que debemos hacer en cada caso, desde nuestra vida espiritual unida a Dios. Para que san Andrés cambie necesitamos es volver a tener esa unidad. Que comunidades y generaciones anteriores tenían, de oración, de ayuno, de generaciones que deben ser para nosotros ejemplos y baluartes de una vida con Cristo, en una vida en unidad con el Espíritu Santo y con Jehová el creador. Si San Andrés vuelve otra vez a su vida espiritual, desde la vida espiritual Dios nos va a iluminar para que cada uno cumpliendo el papel que le corresponde en la sociedad volvamos a construir una sociedad sana y buena que sea ejemplo para nuestros hijos, pero que sea ejemplo también para Colombia, y que desde Colombia nos exportemos para todo el mundo. Mi sueño como mujer que amo a San Andrés, es constituir una isla iluminada por Jesucristo conforme a los principios que Dios nos dejó en la palabra, para que muchas generaciones vengan a beber de nosotros”, manifestó finalmente.